El proyecto de reconstrucción y restauración del inmueble
se inserta dentro del proyecto de recuperación de dos casonas aledañas, construidas
de fines del siglo XIX, el Ex Club Domingo Fernández Concha y la Ex Casa Goycoolea.
Se propone una circulación peatonal de carácter público que atraviesa el
conjunto de casonas y patios interiores, otorgándole una continuidad al pasaje
Sótero del Río desde la calle Catedral hacia la calle Compañía.
El proyecto nace como respuesta a la necesidad de
recuperar y poner en valor el Ex Club Fernández Concha, ubicado en la calle
Compañía de Jesús número 1263, perteneciente a la categoría “Inmueble de
Conservación Histórica” del Consejo de Monumentos Nacionales.
El proyecto de reconstrucción y restauración de la casa se
emplaza dentro del proyecto de recuperación de dos casonas de fines del siglo
XIX, ubicadas en calle Compañía e insertas en el polígono de zona típica “Plaza
de Armas, el Congreso Nacional y su entorno”. Dichas casonas, correspondiente
la primera al Ex Club Conservador Domingo Fernández Concha, diseñado por Lucien
Ambrorise Henault, y la segunda la denominada Casona Goycolea, se encuentran
actualmente con severos niveles de deterioro debido al abandono prolongado por
décadas de sus techumbres y obra gruesa, a la acción vandálica, al
desvalijamiento de sus elementos de decoración interior llevado a cabo por
remates y finalmente por el terremoto de febrero 2010.
Pese a su notable abandono, a la pérdida absoluta de los
recintos, patios de servicio que ocuparon anteriormente la zona norte de ambos
predios y al inminente derrumbe de ciertos sectores de la construcción
existente, el conjunto de las dos casonas se encuentra actualmente en condición
de ser recuperado en términos estructurales y espaciales para responder a un
nuevo horizonte programático.
Su emplazamiento permite considerar hoy al conjunto como
una pieza clave dentro del desarrollo del sector poniente de la Plaza de Armas,
el cual contempla las obras para la Plaza Montt Varas, la recuperación del ex
Edificio de El Mercurio con un centro de servicios y oficinas o la ampliación
subterránea del Museo de Arte Precolombino, entre otras.
Aparte de su complementariedad en términos programáticos y
morfológicos, la apertura del conjunto de casonas y patios a un uso público
permitirá dar continuidad peatonal al pasaje Sótero del Río, circulación que
hasta hoy nunca ha existido debido a que las construcciones comprometidas son
anteriores a la norma que, vía expropiación, define pasajes de corazón de
manzana en el centro histórico (planteamiento que comienza a operar en la
década de 1930). Bajo esta perspectiva, el proyecto constituye un agente de
renovación al transformar el alicaído pasaje Sótero del Río en un nuevo corredor
de servicios que conecta las calles Catedral, Compañía y Huérfanos.
El proyecto contempla la reconstrucción y restauración del
Ex Club Domingo Fernández Concha en su totalidad, sin embargo, el trabajo de
intervención se está ejecutando por etapas. Actualmente se realiza la
restauración de la fachada sur del inmueble que mira hacia la calle Compañía
junto con el reforzamiento estructural de los elementos
soportantes. En esta instancia se presenta una propuesta que apunta a recuperar los recintos que conforman la circulación
principal de la casona: el Zaguán de acceso desde la calle, el Patio Interior y
el Zaguán que une el patio interior con el patio posterior; esto es a través de
la consolidación, reparación, reconstrucción, restauración y puesta en valor de
cada uno de sus elementos.
INFORMACION DEL INMUEBLE
Ubicación: Calle Compañía de Jesús 1263
Arquitecto: Lucien Henault
Historia
El ex Club Domingo Fernández Concha fue diseñado por el
arquitecto Lucien Henault para la residencia de la familia de Olegario Ovalle
Vicuña en un terreno de aproximadamente 1900 m2. Fue construida entre los años
1865 y 1867. Desde su construcción, ha pasado por una serie de propietarios que
destinaron la casona a diversos usos; originalmente residencial, luego se convirtió
en sede del “Club de Señoras de Santiago” fundado por Delia Matte,
posteriormente fue sede del Partido Conservador y finalmente dio paso al
Partido Nacional, hasta inicios de los años 90. En los últimos veinte años el
inmueble ha sido utilizado principalmente para el arriendo de locales
comerciales en el primer y segundo piso del volumen principal hacia la calle
Compañía, el resto del edificio durante este período, se encontraba en estado
de abandono.
No existe información planimétrica en la Dirección de
Obras de la Municipalidad de Santiago que dé cuenta de la configuración
original de la casa ni sus posteriores remodelaciones. Los documentos de mayor
antigüedad a los que se pudo tener acceso son los correspondientes al Archivo
técnico de Aguas Andinas, los que entregan información sobre la estructura de
la planta del edificio en el año 1910. En este documento la casa cuenta con un
volumen en forma de ‘U’ al que se accede por un zaguán y que se vuelca a un
patio principal, desde el cual se ingresa los recintos del primer piso. A
continuación y organizado en relación al eje del edificio, un segundo zaguán
que conecta dos salones, uno circular y otro octogonal. El segundo zaguán se
conecta a un segundo patio, en torno al cual se distribuían los recintos de
servicio.
La construcción del Ex Club Domingo Fernández Concha
coincide con el periodo en que las casonas chilenas comenzaron a reemplazarse
por arquitectura neoclásica. A partir de la segunda mitad del siglo XIX
aproximadamente, la configuración de las manzanas aledañas a la Plaza de Armas
se caracterizaba por las nuevas edificaciones de lógica neoclásica
(configuración por estratos: zócalo - cuerpo - coronación), reemplazando la
tipología de casonas coloniales correspondientes a los períodos fundacionales.
La fachada de la calle Compañía se componía principalmente de edificaciones
pareadas de albañilería de dos pisos, en el primer nivel se encontraban
programas de comercio o servicios, y en el segundo y el tercer nivel se
ocupaban como vivienda.
Dentro de la configuración de este escenario de segunda
mitad del siglo XIX e inicios del siglo XX destacan la construcción del
Congreso Nacional, el ex edificio de El Mercurio y el Palacio de Tribunales, en
los dos primeros participa el arquitecto Lucien Henault, tres obras de gran
magnitud, en relación a las manzanas que ocupan, y que a su vez se establecen
como edificaciones emblemáticas del período.
Es dentro de esta lógica del sector, con determinados
valores tipológicas e históricos, que se inserta el anteproyecto desarrollado
para los inmuebles de Compañía, buscando resaltar parte de sus valores
arquitectónicos originales como una inserción acorde a dinámicas actuales.
El inmueble es uno de los pocos que se mantiene en pie
pese a los fuertes terremotos y la irrupción de nuevas construcciones que
acabaron con tantos otros de su tipo, y constituye hasta hoy un fragmento
coherente y definido de un período particular.
Análisis histórico del inmueble
1910 Durante este periodo el inmueble tiene un uso residencial.
La residencia que había sido construida para Olegario Ovalle Vicuña es
posteriormente heredada en 1884 por Ruperto Ovalle Vicuña, y más tarde en 1911
por Rosa Pérez Ovalle de Vicuña e Inés Pérez Ovalle de Fierro.
La casa contemplaba dos patios en torno a los que
funcionaba la totalidad del programa. Un primer zaguán servía de transición
entre la calle y el primer patio y contemplaba los accesos a los recintos de
primer piso de esa parte del edificio. Un segundo zaguán en eje con el primero
ubicado entre los salones circulares permitía el acceso hacia el segundo patio,
destinado originalmente a los servicios, y a la vez a cada uno de los salones.
El segundo patio distribuía los accesos de la segunda parte del edificio y
además conectaba con una circulación que permitía el acceso a los recintos de
fondo de sitio.
1937 En 1916 Delia Matte fundó el “Club de Señoras de Santiago”,
utilizando como sede la casa. En 1933 la residencia habría sido adquirida por
el ordinario eclesiástico de Santiago para el Club Domingo Fernández Concha. En
1941 El Club Domingo Fernández Concha, correspondiente a la Juventud del
Partido Conservador adquiere el inmueble, el cual realiza una serie de
transformaciones al interior de los recintos, especialmente en el patio norte,
el cual fue techado y modificado para albergar las funciones del Partido. Durante este periodo la fachada del primer piso es
modificada para el funcionamiento de 6 locales comerciales, con sus respectivos
altillos de servicio, que funcionan como
unidades autónomas hacia la calle Compañía.
1989 En 1966 la Sociedad Inmobiliaria Compañía 1263 recibe la
propiedad. La casa se convierte en residencia del Partido Nacional. En el primer piso de la fachada sur, se mantienen los
locales comerciales independientes. El resto de la primera planta estaba
ocupada por recintos conectados interiormente por puertas entre un recinto y
otro, es decir, sin un pasillo o corredor. Los salones circulares también
estaban conectados interiormente con el resto de los recintos y además
presentaban un hall exterior que unía a los dos. Durante los años noventa, la casa pasa por sucesivos usos comerciales
en el primer y segundo piso, lo que va a generar diversas alteraciones y desgaste
de patios interiores.
Actualidad En el año 2004 el Arzobispado es dueño del bien raíz por
transferencia que le hizo la Inmobiliaria Compañía 1263 Ltda. Periodo en el
cual el inmueble es utilizado como locales comerciales en el primer y segundo
piso del volumen que da hacia Compañía. El resto del inmueble se encuentra en
desuso. En el años 2009 el Arzobispado transfiere la propiedad la
constructora SUM ltda. En el año 2010 Constructora SUM Ltda, transfiere por
aporte a Inmobiliaria Angostura Ltda. Los recintos posteriores de la casa son demolidos debido a su deterioro
y problemas estructurales. Se mantienen los volúmenes correspondientes al
primer patio y salones octogonal y circular.
Saludos, queria preguntar si hay alguna fuente de donde sacaron esta información.
ResponderEliminarGracias por el articulo!